Ángeles Guardianes

13/4/2008

En la vida uno tiene que tomar muchas decisiones: hacer una u otra cosa, hacer o dejar de hacer algo, hablar o mejor cerrar la boca a los problemas. Acciones, omisiones, intrigas, cariños, todas las manifestaciones que nuestra personalidad ejecuta en la realidad para gritar que es uno y único, que es una persona que exige su lugar en ese mar de energía que viene y va.

Pero nuestra personalidad no siempre hace las cosas de una forma agradable. Ni siquiera es particularmente decente. El mundo en que vivimos es una muestra de los desmanes de la personalidad de quienes lo habitamos, es el producto de todas nuestras personalidades dando vueltas por ahí, relacionándose con los demás, creando para nosotros realidades particulares en las que decidimos creer y por las que tomamos las decisiones más extrañas.

Pero igual que la personalidad a veces se nos pone quisquillosa y majadera, a veces permite que asome nuestra verdadera naturaleza, se pospone y permite que las partes sublimes de nuestra existencia tomen el control. Es así como establecemos relaciones de amistad con otros seres humanos, relaciones de cercanía y afecto desinteresado con nuestros familiares y por supuesto, relaciones de amor con quienes sentimos cerca del corazón.

Es precisamente de estos períodos de autenticidad de los que está verdaderamente construida nuestra vida, todo lo demás son solo rellenos de los espacios vacíos. Y no hay mejor muestra de amor hacia los demás que los actos de solidaridad, que no son más que actos de amor desinteresado, amor obsequiado sinceramente hacia otro ser humano, sin esperar nada a cambio. Las relaciones que logramos crear y mantener con personas que constantemente están obsequiándonos su amor, es una muestra de nuestro avance en nuestros propios procesos evolutivos.

Este ejército de ángeles guardianes son una señal de que el amor está en nuestras vidas, una señal de que las bendiciones de las que tanto se habla en la vida, de verdad existen y lo mejor es que existen en cuerpo y alma, cerca y siempre dispuestos a sorprendernos. Angeles Guardianes que con sus acciones nos provocan sentimientos tan profundos que no son inexplicables.

A mis Ángeles Guardianes: Alonso, Andrea, Harold, LuisK, Marcia y Mariano, solo puedo decirles que son increíbles, me tomaron por sorpresa, me dejaron sin habla y llenaron mi corazón de un amor tan grande que aun no puedo explicar.

Gracias por estar en mi vida.

No hay comentarios: