Hay mucho por qué luchar


9/10/2007

Para mi amigo William

Para todos fue una sorpresa mayúscula el triunfo del SI el domingo.

Después de tantas semanas de trabajo arduo, casa por casa, persona por persona, compartiendo información, escuchando a la gente, brindándoles esperanzas de que Costa Rica no se convertiría en otro bastión del capitalismo salvaje.

Desafortunadamente, el esfuerzo hecho no fue suficiente, para vencer las mentiras, el miedo, los miles de millones de colones de empresas interesadas, los miles de millones de colones de todos los costarricenses que durante cuatro años gastó el gobierno y sobre todo, no fue suficiente para derrotar a los mañosos de siempre, que hicieron de las suyas, con la innoble pero no extraña, participación del gobierno norteamericano, atizando los miedos y engrosando las mentiras.

El domingo por la noche, cientos de miles de costarricenses estábamos en nuestras casas tristes, pero sobre todo indignados de comprobar lo grandes que son los tentáculos del poder económico y político, nacional y foráneo, porque aunque se dijo lo contrario, si este país ha vivido la infiltración de intereses foráneos en unas votaciones, fue en ésta, por parte del gobierno del señor Bush y su séquito de oportunistas en busca del oro californiano, esta vez en tierras centroamericanas.

Ante tal sensación, es muy fácil desilusionarse y querer abandonar todo esfuerzo por mejorar este país, pero esa es la peor actitud que podemos tomar.

Si en algún momento Costa Rica necesitó de nosotros, es precisamente ahora… mucho más que al inicio de la campaña para el referéndum, porque hoy, esos poderes perniciosos y mezquinos que creen que Costa Rica les dio un cheque en blanco para hacer con sus recursos lo que quieran, deben ser detenidos y eso solo lo puede hacer el pueblo.

Si, usted y yo, los que con valentía, con las uñas y con un gran corazón, nos hemos plantado ante los esfuerzos monumentales de estos poderosos grupos económico-políticos, de despojarnos del país al que tanto le debemos y que queremos dejar como herencia a nuestros hijos.

Hoy más que nunca se requiere del concurso de todos, en pos de la defensa de la institucionalidad del país.

Porque todos esos que ahora hacen llamados de respeto al TSE y a la Corte, son precisamente los que no tienen ningún miramiento en ultrajarlas para obtener beneficios para sí mismos y sus enormes fortunas.

Somos nosotros los que debemos poner el pecho y mostrar la cara, para decirle a esos grupúsculos antipatriotas, que los costarricenses creemos en las instituciones que forman nuestro Estado Social de Derecho y estamos dispuestos a defenderlas.

Tenemos que seguir conversando sobre estos temas en todos lados, en la pulpería, en el bus, en la iglesia, en la peluquería, en el trabajo, en todos lados.

Hoy contaremos con la ventaja de que al aprobare el TLC, el grupo manipulador que engañó a tantos costarricenses, mostará su verdadera cara y empezará a recoger los intereses de su inversión.

Precisamente ese es su talón de Aquiles, porque podremos exponerlos ante el pueblo que ha sido engañado, como lo que son: mercaderes del capitalismo salvaje, que solo tienen interés en sus arcas y tesoros.

Es nuestra obligación ciudadana, hacer uso de todas las herramientas que nuestro Estado Social de Derecho nos da, para defender a Costa Rica.

Apoyemos a los diputados que den la lucha a favor de los mejores intereses del país, apoyemos a los ciudadanos que presenten gestiones ante las instituciones que correspondan, para proteger o recuperar lo que quieran robarse de esta patria hermosa, apoyemonos unos a otros, desde los Comités Patrióticos Cantonales, manteniendo el dedo en la yaga, conservando esta llama de amor y defensa de nuestro país, viva y fuerte, hasta que logremos expulsar del poder, a quienes quieren vilipendiar lo que no les pertenece.

Pero hagámolo desde las instancias que corresponda, demostremos cuanto amamos el Estado al que queremos defender, protegiendo la democracia que lo cobija.

No desmayemos, lo del domingo solo debe dejarnos enseñanzas de todo lo que tenemos que cambiar.

William, no desmayemos, sigamos juntos defendiendo a este país, tu aporte fue importante el domingo y lo será más de hoy en adelante.

Publicado en el Periódico La Prensa Libre del 11 de octubre del 2007.

http://www.prensalibre.co.cr/2007/octubre/11/opinion04.php

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