Pobre Pancho

3/10/2008

A Rodolfo, allá donde aquellos...

Mañana se celebra el Día de San Franciso de Asís, Pancho para los que lo conocemos desde güila.

Y aunque Rodo murió en abril, es esta la fecha que me lo recuerda año tras año, porque me recuerda tantos sentimientos que nos unieron por años, que es como si nunca se hubiera ido. Bueno, nunca se fue.

Rodo y yo entramos al Kindergarden del Colegio María Inmaculada en marzo de 1975. Desde entonces y por doce años, fuimos testigos de todo lo que se hace en nombre del pobre Pancho, a costillas de él y totalmente al margen de sus enseñanzas.

Siempre nos sentimos profundamente indignados por la soberana hipocresía de las monjas del colegio, pertenecientes a una orden franciscana, que gritaban a los cuatro vientos la importancia de cumplir con el voto de pobreza de Pancho, a cuyo nombre nos quitaban todos esos detalles para los recuerdos de nuestra escuela y colegio, como fiestas de graduación, anuarios y demás, ya que esos símbolos suntuosos iban contra los principios Panchísticos, pero en cambio, estrenaban carro del año todos los años, siempre había un viajecito a ver al Papa en Roma y de paso algunas visitas de negocios a Alemania para que las monjas germanas, que parece son muy papudas, soltaran la plata con la que pagaban sus humildes gastos personales... en fin, la pobreza era un voto que en realidad nunca les explicaron con peras y chayotes a las monjitas...

Ay Rodo, como se nos hinchaba el hígado con aquellas inconsecuencias, como queríamos decirles todo lo que pensábamos de ellas, todo lo que nos indignaba su actitud mojigata y farsante... bueno, algún día vos te diste el lujo de soltarles alguno que otro de estos pensamientos, en aquel traspaso de poderes del gobierno estudiantil que pasará a la historia...

Hoy no estás físicamente conmigo Rodo, pero te sigo sintiendo junto a mí, cagándome por ser tan cándido y por dejarme embaucar de cualquiera, pidiéndome que me hiciera cargo de mi vida, que buscara imponerme disciplina... vaya discusiones nos dimos sobre la necesidad de la disciplina en la vida... nunca llegamos a nada, aunque yo siempre supe que tenías razón.

Pues ante la inminente celebración del día de Pancho, quiero enviarte un fuerte abrazo y mi ruego para que dejes las moradas eternas, aunque sea por un ratico, para que vengas y les jales las patas a las monjas, que bien se lo merecen.

Vos sos la luz Rodo, vos sos la luz.

1 comentario:

Manolo Matos dijo...

No pude evitar ladrar... No creo que Rodo haya tocado a alguien sin que ese alguien le recuerde con cariño. En verdad que parece que fue ayer que se nos fue. Ojalá y todas sus preguntas ya hayan sido contestadas. Tengo una foto de Rodo subacuático que si la consigo te la envío. Muy buenos los dos blogs.